9 de agosto de 2017

LOS RUSOS, MIS RUSOS

Aquí os dejo uno de mis poemas favoritos de FYODOR IVANOVICH TYUTCHEV (1803-1873).

PACIFICACIÓN

La tormenta se retiró, pero Thor ya había encontrado su roble,
y ahí yace magníficamente abatido,
y de sus miembros un resto de humo azul
se propaga a los brillosos árboles repintados por la lluvia

mientras que el zorzal y la oropéndola se apuran a remendar
sus rotas melodías a lo ancho del bosquecillo,
sobre la cresta del cual apunta el extremo

de un torciente arcoiris bordeado de malva

1 de septiembre de 2014

Hielo

Y perderte a tí...

                                   ...como se pierden las horquillas



8 de junio de 2014

Dos palabras o mejor, ninguna

¿Para qué decir nada?
¿Para qué escribir nada?
Si ya queda testimonio de horquillas
decorando el suelo de tu habitación.

Ese gesto que me regalas de cuándo en cuándo
que sólo yo sé cómo me recorre la piel 
y me levanta del suelo
el tiempo justo que aguanto antes de abrazarte
y llenar tu cara de besos
para que siempre tengas de sobra.
Y es cuando te rebosan los piropos,
las caricias, los besos y las miradas tenutas
que yo las recojo 
como el que se refresca la cara en una fuente
de agua cristalina y dulce
después de un día de calor.

Cuando el tiempo pasa a través de nosotros
Madrid es más castizo,
la gente es única
y el aire huele a verano.

Y es entonces cuando sé
que no hace falta escribir sobre esto.
Porque los dos sabemos 
cuando cruzamos las miradas
que no hacen falta estrellas que recuerden esta historia.
Que ya quedó grabada en los adoquines
al pisar los días,
las noches que se nos escapan
y la luz del día que nos sorprende dando tumbos
por las calles de Madrid.



2 de abril de 2014

Nocturnidades

No sé si es porque te dejo,
porque me obligo a dejarte,
que llego a mi lugar nocturno,
a la plaza de las despedidas,
de los "me ha encantado verte"
y de "nos vemos el martes entonces",
llego, y HOY me niego a sólo

esperar.

Me coloco en lo que parece
el sitio perfecto
y me dejo abrumar por las luces,
azules en la fuente,
doradas en las farolas,
más tenues en las ventanas,
fluorescentes en los autobuses
que esperan la señal del reloj
para comenzar su danza,
despliegue nocturno
e incómodo hoy para mí,
que sigo en frente de la diosa y sus leones.

Es noche cerrada y a mi me fascinan las luces.

Abro los ojos todo lo que puedo
para que la luz que desprendes
y la de los coches,
que me miran blancas y me dejan rojas,
entren por mis pupilas
y se graben a fuego en mi retina.

No sé si es porque te dejo,
que el metro me parece acogedor,
que adoro no saber perderme
entre tus callejones castizos.
Es ahora que me parece adorable
el vaivén de los transeúntes
que corren buscando el N-número
de viaje a casa,
mientras yo sigo aquí quieta,
respirando tu noche y cerrando los ojos
para comprobar si soy capaz de recordarte
así de bonita y tan especial.

Esperaría otros 40 minutos
para seguir contemplando
lo que tantas veces había dado por visto,
pero debo irme...
las alas de mi búho se han abierto.

No sé si es porque te dejo,
pero ahora y más que nunca,
mi ciudad,
estoy profundamente enamorada de tí.

Un último vistazo.

Respiro.

"Buenas noches. Un sencillo, por favor"

18 de octubre de 2013

Schlaflosigkeit

Tu sabías que mientras yo infravaloro mis horas de sueño, la gente sigue su vida, la vida su curso, la gente sus cursos y yo yo sigo entre aviones y árboles? Y que amanecer, amanece a la misma hora, por mucho que me esconda bajo esta gran camiseta que no es mía ni huele a mí... Es desesperante pensar estas cosas cuando ya son las dos y media de la mañana y no hay nada que hacer. Hacer, eso sí, voy a hacerme un café a ver si me duermo. 

Buenos días.




5 de julio de 2013

"Du bist so schön..."

Tu altura y tu pelo rubio
tus ojos azules como el mar 
que nos soportaba cuando
la hierbabuena o la malta bañaba 
nuestras gargantas rasgadas.

Toda la rigidez y la tosquedad 
de tu gentilicio me hace adorar
sorprendida tus caricias
y tus besos y tus palabras
germanas, sajonas, castizas.

Me has despejado 
las dudas de un viaje escandinavo 
llenando juntos de ropa
el suelo de un salón despejado.

Tumbada sobre la piel del mar
descubro el tacto de tu piel de hierro,
suave y cariñosa como el agua.


Y bajo las mesas que sujetan 
las mejores conversaciones
nos queremos

comer el uno al otro.





19 de junio de 2013

Insomne hematoma

Cómo me gustaría que el amor y todos sus afluentes no fueran tan obligada analogía con mis venas y arterias que sin remedio llegan a mi corazón, acurrucado, tembloroso y temeroso de infectarse de nuevo con glóbulos negros, corruptos y camuflados entre historias pasajeras que me llenan la mente de pájaros, que pican mi lóbulo frontal y me provocan las alucinaciones que me sacan un suspiro de aire que llega a mis pulmones cuyos alvéolos filtran el oxígeno que llega a la sangre, que contiene glóbulos negros, corruptos y camuflados que llegan a mi corazón, ya tiritando, a través de mis venas, arterias, afluentes, ríos, mares, que se evaporan y crean las nubes en las que me hallo cuando los pájaros pican mi lóbulo frontal y entonces alucino, y alucino, y aluc....

Puta ciencia.

Santa y p
                    u
                             t
                                    a
                                           Pasión.

Al carajo

Noche de tres horas,
la noche que cubre el cielo con un edredón morado
el tiempo suficiente para oscurecer las intenciones.

Despejo el cielo para nublar tus ideas
y cuanto más sale el Sol en la ciudad,
más quema en las mentes de los hombres buenos.

Y es que el aumento de temperatura
se hace inevitable
cuando me doy la vuelta
y agarro el brazo que me abrazaba
y que ahora empieza a moverse
acariciando mi hombro.

Mis manos tocan tierra, clavícula, cuello,
explorando descubren músculos
que no han visto en ninguna otra espalda.
Dedos que en movimientos impredecibles
recorren mi columna
y me hacen suspirar con un espasmo.

Nadie dice nada.

Oficialmente,

estamos durmiendo.



8 de junio de 2013

Declaración de Censura

Quiero gritarte las cosas que escribo a la cara.

Cerca.

Pero por miedo a que cierres los ojos
ni siquiera escribo lo que mi mente grita
por dentro.

En sustitución, escribo esto.
No vaya a ser que la pestaña de "Favoritos" 
me corte las cuerdas vocales.

Ya está.